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México • Solo diez de los 31 policías que declararon por los disturbios del 1 de diciembre y que continúan participando en el juicio contra los acusados por estos hechos identificaron y señalaron directamente a los presuntos responsables, entre ellos a los 13 procesados en el juzgado 47 penal.

De acuerdo con el expediente del caso, el resto de los uniformados acusaron a diversas organizaciones como el Frente Popular Francisco Villa, Antorcha Campesina, el Sindicato Mexicano de Electricistas y el movimiento #YoSoy132, como los responsables de los desmanes en el corredor Zócalo-Reforma, durante la toma de protesta a Enrique Peña Nieto como presidente de la República.

Hoy, los efectivos de la Secretaría de Seguridad Pública y de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal iniciarán el proceso para ratificar y, en su caso, ampliar su declaración por lo ocurrido.

En su primera declaración ante el Ministerio Público, los uniformados precisaron su ubicación, la hora en que se encontraban en la respectiva zona, el motivo de la detención de los presuntos responsables e incluso, en algunos casos, la orden recibida por parte de su mando inmediato.

Estos efectivos, que tendrán que acudir a dicho juzgado del Reclusorio Norte, pertenecen en su mayoría a la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal, Policía Industrial y Bancaria, Tránsito y Auxiliar, mientras que solo nueve son de la Policía de Investigación de la procuraduría capitalina.

Según el documento de citatorio a los policías, los respectivos uniformados tendrán que acudir este día y en adelante cada martes y jueves hasta el 7 de marzo para seguir el proceso con sus declaraciones.

Los primeros en ser citados fueron Simón Beltrán Olivares, Rosalba Hernández Páez y Ángel Moreno Díaz, quienes debieron realizar esta diligencia el pasado martes, pero debido a que no todos los procesados llegaron a la audiencia, ésta se pospuso para el 7 de marzo. Además, solo uno de estos agentes de la SSPDF asistió.

El auto de formal prisión de los procesados indica que estos tres elementos fueron los únicos que señalaron y reconocieron en sus respectivas declaraciones ministeriales a los entonces 56 consignados, incluidos nueve de los 13 que posteriormente serían procesados por el delito de ataques a la paz pública en pandilla.

Según estos agentes, Eduardo Daniel Columna Muñiz, Oswaldo Rigel Barrueta Herrera, Roberto Fabián Duarte García, Carlo Miguel Ángel García Rojas, Obed Palagot Echeverría, Alejandro Lugo Moreno, Sandino Jaramillo Rojas, César Llaguno Romero y Rita Emilia Neri Moctezuma se encontraban en el grupo que los agredió.

Los policías precisaron que los manifestantes atacaban a los uniformados con palos, piedras, botellas, canicas y bombas molotov, entre otros objetos, además de que destrozaron patrullas y causaron daños a diversos establecimientos comerciales, los cuales “saqueaban”, por lo que fueron detenidos.

“El 1 de diciembre del año en curso (2012), me notifica vía radio mi mando superior, Roberto Carrión Barrios, que por necesidades del servicio tenía que continuar laborando (…) siendo aproximadamente las 12:45 horas me avisan que tenía que pasar a la calle Balderas y Avenida Juárez para apoyar a unos compañeros que se encontraban en el lugar del conflicto.

“Observamos que se encontraba una multitud entre 70 y 100 cien personas, quienes estaban violentos (…) empezaron a balancear la unidad, tratando de voltearla, por lo que lograron estrellar completamente el parabrisas, toda vez que le arrojaron piedras, palos y botellas de cristal de la unidad”, dijo Beltrán Olivares en su declaración asentada en la foja 79 del expediente.

No obstante, la juez desestimó las declaraciones de estos tres agentes al considerar que eran “imprecisas” y “generales”, por lo que no fueron “aptas” ni “idóneas” para constituirse como elemento de prueba:

“Una vez que logran asegurar a varias personas, de las cuales no me pude percatar quienes fueron los que ocasionaron los daños a la unidad; sin embargo, al tener a la vista en el interior de estas oficinas a las personas de los siguientes nombres (…) los reconozco plenamente sin temor a equivocarme por las vestimentas que portaban”, abundó el policía.

Mora Brito recurrió a varias imágenes, tanto de las cámaras del C2 del gobierno capitalino, así como de diferentes televisoras, como MILENIO, y de páginas de internet para ubicar a los presuntos responsables y dictarles auto de formal prisión.

En tanto, los agentes de la Policía de Investigación de la procuraduría capitalina acusaron directamente al resto de los procesados de agredirlos y por portación de armas que presuntamente se utilizaron durante los desmanes.

Los siete policías de Investigación aseguraron que Enrique Rosales Rojas, Jorge Dionisio Barrera Jiménez, Daniel García Vázquez y Stylianos García Vackimes fueron responsables de los delitos que se les imputaban. En este caso, su declaración fue suficiente para que la juez Mora Brito determinara dictarles auto de formal prisión.

En el caso de García Vázquez y García Vackimes, los agentes que los detuvieron, Gabriel Zamora Castineyra y Jorge Cacho Pulido, argumentaron que en el momento de la revisión ambos tenían en su poder, en la mochila y pantalón, respectivamente, una granada.

“Al encontrarnos dentro del operativo ‘Palacio Nacional’, siendo aproximadamente las 14:30 horas sobre el Eje Central esquina con Juárez e Independencia (…) nos percatamos de que Enrique Rosales Rojas comenzó a gritar…

“Posteriormente, golpea al comandante de esta Policía de Investigación, Arturo Mendiola Curiel, en el rostro con el puño, causándole lesiones en el labio superior y un segundo sujeto, Jorge Dionisio Barrera Jiménez, de igual forma golpea en el rostro rompiéndole sus lentes de aumento”, afirma el informe de este policía ubicado en la foja mil 047 del expediente.

El resto de los efectivos que no consiguieron identificar a alguna persona en particular o que lo harían si “los volvieran a ver” o que en su caso señalaron a otras agrupaciones como las responsables de los desmanes del 1 de diciembre, tendrán que asistir a este proceso en la fecha que les corresponda.